Cómo viajar sin gastar mucho

Debemos admitirlo: ¿quién no viajaría gastando lo menos posible? Invertimos muchísimo tiempo buscando maneras de ahorrar y de evitarnos unos euros en casi todos los ámbitos de nuestra vida. Y aunque puede parecer difícil, no es imposible, a la hora de viajar también se puede. A continuación te vamos a dar algunos consejos que te pueden ser de utilidad si deseas ahorrar y, al mismo tiempo, conocer lugares alrededor del mundo.

El billete de avión

El problema que solemos encontrar a la hora de viajar es el billete de avión; por lo general su coste es bastante elevado y supone muy a menudo un obstáculo para realizar el viaje de nuestros sueños. Sin embargo, hay que tener en cuenta que disponemos de diversas maneras para reservar. Una de las maneras más evidentes de ahorrar consiste en, en vez de acudir a una agencia de viaje, donde los costes son muy superiores, comprar los billetes por Internet. Este método es más barato y, también, bastante más confortable, dado que lo podemos hacer desde casa.

Otra de las maneras más efectivas de gastar menos en el billete es la de reservar el viaje antes de tres meses. Saber cuando queremos viajar y reservar los billetes con bastante antelación es clave, sobre todo durante los meses de verano, cuando la demanda es muy elevada y el precio aumenta. Escoger compañías aéreas low cost como Ryanair, Fly Jet o Transavia ayuda también en sobremanera; a pesar que pueden no resultar tan confortables como otras opciones, es la estrategia perfecta para ahorrar en el billete y gastar más en el viaje en si. Es muy recomendable emplear sitios web de comparativa para saber a ciencia cierta dónde encontrar los precios más baratos.

El hotel

El segundo problema, ya que seguramente supondrá el segundo gasto más elevado del viaje, es el alojamiento. Elegir un lugar donde dormir puede ir en función de las prioridades; puede que te guste el máximo confort y el mayor número de prestaciones posibles, pero si quieres gastar menos deberías optar por lugares como hostales, donde los precios son más bajos.

Igual que en los billetes de avión, reservar con tiempo te permitirá elegir entre una mayor variedad, así como también gastar menos. Utiliza servicios online como Booking.com, Trivago u Hoteles.com para realizar tus búsquedas.

La comida

Evidentemente, la experiencia turística no es completa si no saboreamos los platos típicos del lugar que visitamos. ¿Cómo lo hacemos? ¡Muy fácil! Lo mejor es olvidarse de ir a restaurantes caros y gastar mucho dinero en algo que podemos experimentar de una manera más barata.

Visita los barrios más tradicionales de la ciudad, donde podrás probar los verdaderos platos típicos de la zona, así como la auténtica cultura del país. No solamente te resultará menos caro, sino también mucho más delicioso.

Lugares culturales

Está claro que cuando elegimos un destino turístico, uno de nuestros objetivos es ver cuanto más, mejor, así como disfrutar del lugar en sus ámbitos históricos, culturales y geográficos. Cuando no conocemos un lugar lo primero en lo que pensamos es en la guía turística, un gasto suplementario que no hace más que engrosar nuestro presupuesto de viaje.

Si prefieres poder prescindir de ello, lo mejor que puedes hacer es informarte bien antes del viaje: Internet y los periódicos culturales están llenos de datos a tu alcance, donde podrás consultar los lugares de mayor interés y apuntarlos. Eso te permitirá tener una idea previa de la ciudad y ser un turista con conocimiento. A veces, investigando un poco, puedes encontrar lugares que de haber ido a ciegas hubieras pasado por alto.

Viajar es una ocasión única que nos permite vivir experiencias maravillosas y muy intensas, así como ampliar nuestro mundo y vivir cosas increíbles. Así que piensa un destino, hazte con una buena maleta… ¡y que nada frene tus ganas de conocer nuevos lugares!